Regresa Dimisión Imposible con un concierto especial

Dimisión Imposible

Dimisión Imposible se unen para ofrecer un concierto especial 
en El Cañaveral, Castilleja de la Cuesta,
Domingo 22 de Diciembre 2013
Nico Salas

Bajo el nombre de Dimisión Imposible se reunieron, allá por 1990, cuatro músicos con la idea y la necesidad de disfrutar de la buena música, versionando a clásicos de  todos los tiempos como Crosby, Stills, Nash & Young, Beatles, Prince, Jim Croce, James Brown, Eric Clapton y un largo  etc.
Tratando a las canciones con cariño y excelsa calidad, este cuarteto que simultaneaban sus actuaciones con grabaciones de estudio para los más importantes grupos y solistas del panorama andaluz y nacional, hicieron historia durante la Exposición Universal de Sevilla  celebrada en el año  1992. Su hábitat natural era el mítico local llamado El Canguro,  que mas tarde, a la finalización de la Expo, se ubicó en los alrededores del Teatro Central de la Cartuja sevillana, donde siguieron haciendo las delicias a los asiduos visitantes durante algunos años más.
La banda se separó a comienzos de 1995 pero continuaron unidos por la música y la amistad, hasta ahora, que han decidido volver para un concierto especial que se celebrará en el emblemático local de la calle Real de Castilleja de la Cuesta llamado El Cañaveral. La cita es el próximo domingo 22 de diciembre.
Juan de la Oliva, el batería de la banda, fue miembro deEl Berklee College of Music, en Boston, Massachusetts, y actualmente regenta una escuela de música en el barrio de  Los Bermejales y ha sido músico componente en bandas míticas como Pata Negra, J. M. Soto y Mingo & TheBlues Intruders.
Pedro Menchen, conocido en el mundillo musical como Pilo, se encarga del bajo eléctrico. Entre una larga lista de bandas en las que ha participado destacan, por ejemplo, ilustres del rock andaluz como Cuarto Menguante o Alameda y durante años fue el bajista de Cantores de Híspalis, auténticos revolucionarios de las sevillanas.


Valentín Ponce, guitarra eléctrica y voz, es asiduo músico de estudio, participó en diferentes etapas, en formaciones de la talla de Pata Negra y acompañó a solistas emblemáticos del rock y el pop sevillano como  Kiko Veneno y Raimundo Amador.
Por su parte, Javier Bonilla, guitarra y voz, es un viejo conocido de los melómanos andaluces, componente de la mítica Caledonia Blues Band y de Manteca, entre otras bandas. Comenzó su carrera musical a la vez que hacía sonar sus discos de vinilo en las más conocidas discotecas sevillanas de las décadas de los 80 y 90.
Todavía se recuerdan sus espectaculares duetos junto a otro pinchadiscos  carismático sevillano, Chico Dj, en la discoteca Río, justo en la rivera trianera del Guadalquivir. En la actualidad ejerce labores docentes, siempre relacionadas con la música.




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