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Dueños y Cocinero



Irrumpe el Charlotte Nervion en la oferta de Gastrobares de Sevilla
Nico Salas

La moda de los gastrobares se arraiga en Sevilla. Son muchos los espacios que han apostado, en los últimos años, por este nuevo formato dentro del gremio de la hostelería y en algunos casos con gran éxito.
El pasado sábado irrumpió en el panorama culinario sevillano un nuevo gastrobar. Se trata de Charlotte Nervión, ubicado en la calle Luis Arenas Ladislao, junto al estadio Ramón Sánchez Pizjuán. En su inauguración, el espacio ofreció conciertos de varios artistas y grupos de flamenco, entre los que estaban Son Flamenco, Jacobo, La Plazuela, Carlos Chanely o Álex Larache.
La filosofía de un gastrobar es la de ofrecer cocina elaborada, de calidad, con productos frescos a precios asequibles. En ese sentido, la carta de Charlotte Nervión está compuesta por quesos y chacinas, entrantes y picoteo, especialidades, carnes, productos de la mar y una amplia carta de vinos.
El cocinero y creador de la carta es Luis Bravo León, profesional contrastado con  más de diez años de experiencia en restaurantes de Sevilla y Madrid. “Me gusta la cocina tradicional con un toque de originalidad. La cocina mediterránea, reconocible, que se entremezcla con las nuevas tendencias”, comentó Luis Bravo.
Entre las tapas estrella están el tartar de salmón fresco con guacamole,  el risoto de boletus, el pincho moruno de atún o la carrillada ibérica confitada a las hierbas. Hay tapas, medias raciones y raciones enteras, con unos precios que oscilan entre los 2,60 euros, en algunas tapas, y los 12 ó 13 euros en las raciones.
La carta de vinos es muy completa. A la hora de elegirlos se han tenido en cuenta las zonas de denominación de origen que más gustan. Hay vinos tintos, rosados y blancos. Autóctonos de Andalucía, como puede ser Barbadillo, y varios internacionales como, por ejemplo, el Uvas del Sol Malbec, de Argentina.
Lo interesante de un gastrobar, es que además de ofrecer comida exquisita a precios asequibles, “tiene un horario muy amplio de tarde y noche que permite ofrecer copas de calidad y cocteles, entre otras posibilidades, en un entorno único”, comenta Mario Álvarez, uno de sus responsables. En este sentido, “las sobremesas y meriendas con café, tartas, batidos helados y las copas de todo tipo de alcohol, son un reclamo”, apunta.
Charlotte Gastrobar Nervión tiene tres espacios y una zona al aire libre. Hay mesas de restaurante, mesas altas de tapeo, y zona de sofás, mientras que la decoración es de un original estilo vintage. El espacio es tan grande y acogedor que a lo gastronómico se le suma lo cultural.
“Durante los fines  de semana celebraremos conciertos de grupos de flamenco para que el que viene a tomarse una copa pueda disfrutar de música en directo. Tenemos habilitada una pared para realizar exposiciones de fotografías. Entre semana habrá un grupo de chirigota. Tenemos pensado hacer el Día de la Abuela con encuentros de cocina tradicional y moderna. Charlotte Nervión es un espacio idóneo para que la gente puede llevar a cabo sus iniciativas culturales: charlas, muestras, etc”, aseguró Emilio Benítez, el segundo socio del gastrobar.

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