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| La Asociación de Guías de Doñana se ha presentado hoy como una iniciativa para mejorar este destino de turismo de naturaleza en la tercera edición de la feria de las aves de Doñana -la Doñana Birdfair-, clausurada en la reserva natural concertada de la Dehesa de Abajo |
ANDALUCÍA INFORMACIÓN
La Asociación de Guías de Doñana se ha presentado hoy como una iniciativa para mejorar este destino de turismo de naturaleza en la tercera edición de la feria de las aves de Doñana -la Doñana Birdfair-, clausurada en la reserva natural concertada de la Dehesa de Abajo (Sevilla).
El presidente de esta asociación, Justo Martín, ha declarado a Efe que Doñana es un espacio natural "único" no sólo por su abundancia de aves o por "el famoso lince", sino también por su flora única y por la variedad de sus paisajes que, en su opinión, está insuficientemente promocionado.
"Uno de nuestros objetivos es mejorar la marca turística de Doñana; nos sorprende que un sitio tan excepcional no sea visitado con la intensidad que debiera", ha opinado.
Ha recordado la tendencia de pérdida de visitantes de Doñana en los últimos años, pese al incremento turístico en Andalucía y en España, que ha batido récords, y ha abogado por "mejorar la marca turística Doñana" con una oferta de guías "de calidad"
Esta asociación suma ya medio centenar de afiliados y pretende homogeneizar los diferentes tipos de guías que trabajan en Doñana, mejorar su preparación y la calidad del servicio que prestan.
Respecto a los equipamientos de Doñana, que acumula los máximos reconocimientos mundiales como Reserva de la Biosfera y Patrimonio de la Humanidad, ha dicho que tiene media docena de centros de visitantes, algunos de los cuales carecen de actividad por su ubicación y por la escasez de personal y de contenido expositivo.
Ha abogado por la apertura de nuevas rutas por el interior de Doñana, siempre "muy respetuosas" con su gran valor ecológico, a ser posible sin vehículos a motor, para superar el monopolio en torno a Almonte (Huelva) y El Rocío y mostrar "la gran parte de Doñana que pertenece a Sevilla e, incluso, a Cádiz, que ahora está más olvidada pese a que su acceso es más sencillo".
"Estas visitas tendrían que hacerse bajo unas premisas bastante estrictas, pero serían superatractivas porque supondrían una forma de acercarse al Parque Nacional que hasta ahora no es posible", ha explicado.
En su opinión, las 70.000 hectáreas de arrozales sevillanos ofrecen un atractivo "tremendo" para el turismo ornitológico por su riqueza ecológica, pese a lo cual aún son poco conocidos.
Para el director de Coordinación Territorial de SEO/BirdLife, Ramón Martí, Doñana "está perdiendo posiciones" en la clasificación del turismo ornitológico español, en el que ha sido adelantada por destinos como Extremadura.
Martí sostiene que Doñana debería de imitar la estrategia extremeña de unificar sus destinos ornitológicos en una única marca, promocionarla como "política de Estado" a nivel nacional e internacional y mejorar la formación de los trabajadores del sector.
"Lamentablemente, eso no sucede en Andalucía, ni siquiera en Doñana, que actualmente no se está vendiendo como un destino único, sino como Doñana-El Rocío, Doñana-La Puebla y hasta Doñana-Cádiz", ha advertido a Efe.
Para este experto en turismo ornitológico, Doñana tiene "un potencial de naturaleza brutal", pero necesita "unificar" su marca "y hacerla de calidad".
El responsable de WWF en Doñana, Juanjo Carmona, también coincide en que el potencial turístico de este espacio protegido "sigue estando infravalorado" y tiene "un recorrido muy importante".
"Hay que mejorar la oferta en todos los sentidos para conseguir que Doñana sea referente en turismo de naturaleza, con una mejora de los equipamientos públicos, una mayor participación de las empresas de la zona y una mejor promoción internacional", ha señalado a Efe.
La tercera edición de la Doñana Birdfair, en la que han participado medio centenar de expositores de ocho comunidades autónomas y espera sumar unas cinco mil visitas, se ha clausurado con una mesa redonda sobre la figura y la obra de José María Blanc, pionero en la conservación de Doñana, a la que contribuyó económicamente, recientemente fallecido.
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